¿Qué es la limpieza criogénica?

Es un método basado en la proyección, a alta presión, de un chorro de hielo seco en pequeñas partículas y compactas denominadas pellets de CO2, los cuales trabajan a -79°C. Estos pellets de hielo seco son acelerados por medio de aire comprimido consiguiendo un proceso libre de humedad a una velocidad de aprox. 300 m/s, y alcanzan el revestimiento a limpiar donde producen un choque térmico puntual. De este modo, la capa a eliminar se contrae y se desprende del material base. La energía cinética producida elimina la capa de suciedad.

En el choque, los pellets de hielo seco pasan inmediatamente al estado gaseoso (sublimación) y no dejan tras de sí humedad alguna. Dado que los pellets tienen una dureza de sólo aprox. 2 Mohs, no se produce ninguna abrasión y la calidad de la superficie se mantiene.

Beneficios de la limpieza criogénica

Puede realizarse sin desarmar o desensamblar la máquina, sin necesidad de esperar un tiempo de secado, dando como resultado una limpieza en horas.

No es abrasivo, no toxico y no es corrosivo. No generar residuos adicionales como solventes, arena y otros, los cuales se convierten en contaminantes que requieren ser desechados inmediatamente.

Los pellets de CO2 (Dióxido de Carbono) simplemente desaparecen al contacto, sin agregar ningún agente tóxico al ambiente. Reduce el volumen de los residuos, eliminando la creación de desechos secundarios y la necesidad de usar químicos dañinos para el ambiente y la salud.

Consigue una limpieza más detallada y rápida, llegando a las áreas manualmente inaccesibles. Ofrece el valor de una limpieza delicada al igual que de una limpieza agresiva. Todo en uno.

Este proceso versátil limpia minuciosamente, dejando el equipo o maquinaria totalmente seca y en su lugar, evitando daños a áreas sensibles como switches, sensores, paneles y más.

La tecnología de Dry Ice Blasting es un método natural de limpieza antibacterial. Por la temperatura extrema de -79°C, el hielo seco remueve bacterias y hongos inmediatamente después del contacto. Por lo que al momento de limpiar, la superficie es también desinfectada sin la necesidad de recurrir a químicos o agentes tóxicos adicionales.